El Gaviero

Quinto Lugar de Violencia contra las Mujeres

Por Omar Williams López Ovalle

Son de esas veces en las que no nos conviene ser de los primeros lugares, pero la realidad es así. Aguascalientes goza de mucho prestigio al ocupar primeros lugares en electrificación, disponibilidad de agua potable y alcantarillado, recolección de basura, tratamiento de aguas residuales, captación de inversión extranjera directa, clima de negocios, en todos estos rubros estamos en los tres primeros lugares.

Sin embargo, en el tema de la violencia contra la mujer, Aguascalientes ocupa el quinto lugar nacional con mayor incidencia con el 70 por ciento de casos presentados en mujeres de 15 años y más, de acuerdo con el INEGI.

Este domingo 25 de noviembre es el Día de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer y en Aguascalientes acabamos de realizar un foro regional en donde se analizó esta situación y muy concretamente el tema de los refugios para mujeres maltratadas.

Con la presencia de destacadas personalidades en el tema de refugios para mujeres como el caso de Roxana D Escobar de Mujer Contemporánea, de Kareen Giselle Santillán del refugio Un Ju de Querétaro, entre otras personalidades quienes expusieron en las mesas de trabajo un conjunto de problemáticas que vale la pena rescatar e ir procesando los resolutivos que en próximas entregas les iré compartiendo.

Entre otros conceptos, vale la pena destacar aspectos como por ejemplo, el hecho de que el hogar se ha convertido en el lugar más inseguro para muchas mujeres en México. Encuestas levantadas por el Instituto Nacional de la Mujer y por el propio INEGI, hablan que más de la mitad de las mujeres agredidas física y emocionalmente han sido violentadas el interior de los propios hogares, lo que vuelve estos lugares sitios de alto riesgo, de ahí la importancia de los refugios para mujeres victimas de violencia.

De no poner un freno que detenga la violencia hacia las mujeres, los casos de homicidios y de lesiones físicas, emocionales, sociales, culturales, económicas, continuarán a la orden del día, reproduciendo los mismos esquemas generación tras generación.

Antes de analizar si se instaurar el “feminicidio” como nuevo tipo penal, antes de ello debemos de reforzar las medidas que prevengan verdaderamente la violencia hacia las mujeres. Hay una ley que contempla una vida libre de violencia para las mujeres, sin embargo no se cumple o resulta insuficiente, por

lo que debemos de discutir ampliamente este fenómeno que año con año causa la muerte de muchas mujeres, así como una infinidad de lesiones que disminuyen su calidad de vida y que las mantiene en una situación de verdadera desventaja frente a los hombres.

Por ejemplo el INEGI en su más reciente encuesta sobre violencia contra las mujeres afirma que en nuestra entidad, 7 de cada 10 mujeres de más de 15 años ha sido víctima de algún tipo de violencia lo que coloca a Aguascalientes como el quinto lugar nacional con más violencia hacia las mujeres.

En la legislación penal mexicana existen diversos tratamientos y penalidades para una misma conducta, lo que demuestra la ausencia de armonización jurídica en la legislación penal que aborda la violencia contra las mujeres.

Cuando se cometen conductas delictivas contra las mujeres y no se sancionan en las entidades federativas de la misma manera, ni se consideran las mismas circunstancias, se coloca a las mujeres en diversos grados de desprotección o vulnerabilidad, dependiendo de la entidad federativa.

La aplicación del derecho debe tener un efecto transformador en la sociedad, pues debe señalar con toda claridad aquellas conductas que no serán toleradas ni permitidas, reconociendo y respetando en todo momento los derechos humanos de todas las personas y, de manera particular, los derechos de las mujeres.

Más aún, nuestro país ha suscrito y ratificado los tratados y leyes que protegen a la mujer, pero las legislaciones locales no reflejan los criterios propuestos en ellos, existe una responsabilidad del Estado en la violación a los derechos humanos. Así, es urgente una revisión de los códigos penales a la luz de los tratados internacionales. Hablamos concretamente de la armonización legislativa en donde todas las entidades, incluida Aguascalientes, está desfasada.

Por otro lado, considerando que la producción de estadística debe dar cuenta de los fenómenos sociales que interesan al país, en este caso se deben proporcionar indicadores de incidencia delictiva que reflejen efectivamente la situación de seguridad –o inseguridad de las mujeres.

El reto es grande, sin duda, pero más grande es nuestra capacidad como sociedad para enfrentar exitosamente nuestros problemas así que, dialogando es como vamos a ponernos de acuerdo y a trabajar en una sola directriz para seguir construyendo ciudadanía.